Ninguno de los dos, primero, porque no tiene validez legal, ya señalamos que sólo los órganos de control de cada país puede dar las credenciales, pero la segunda y para nosotros la más importante es que:
Un investigador que necesita una identificación no es investigador.
El trabajo de obtener información de la fuente no es como se ve en películas, en donde sacan un pedazo de metal y las personas responden como tontas, la ciertos es que esas son películas y por cierto malas porque así no se trabaja, ya que delatarse de esa forma solo lo hacen los agentes de la policía (ya ven porque nunca resuelven casos o se demoran años).
En contraste, un detective privado formado debe utilizar estrategias para obtener esa información y NUNCA será portando un papel o un pedazo de metal, porque eso lejos de dar confianza a las personas, este cierra la comunicación y perjudica la obtención de información. De ahí que es lógico pensar que serán sus conocimientos, estrategias o artimañas las que consigan la información (es por eso que nosotros obtenemos más información de las personas que la misma policía).
Ahora, ya se podrán imaginar, que opinamos de las personas que ofrecen eso en un curso de detective. 🙂